El oficialismo movió en busca de avanzar con la aprobación del Presupuesto bonaerense y la ley Impositiva 2025. Despachó ambos proyectos en comisión y abrió la inevitable negociación con la oposición para que ambas iniciativas se voten antes de fin de año.
Si bien dio un primer y necesario paso en la comisión de Presupuesto que preside el oficialista Juan Pablo De Jesús, el movimiento no es suficiente. Ahora, deberá arrancar una negociación con distintos sectores de la oposición ya que sus votos son necesarios, al menos, para sancionar el capítulo del endeudamiento que contiene el cálculo de recursos y gastos para el año que viene.
Legisladores radicales, del PRO y la Coalición Cívica venían denunciando que no había contactos con funcionarios del Ejecutivo para avanzar en las conversaciones. Y de hecho comenzaron a lanzar la versión en el sentido de que si se mantenía este escenario el debate iba a pasar para febrero o marzo.
El apoyo radical
El viernes fue el propio peronismo el que de alguna manera terminó forzando a los funcionarios de Axel Kicillof a negociar. Lo hizo de un modo singular: consiguió en la comisión el respaldo del diputado radical Pablo Domenichini, del sector de Martín Lousteau.
Frente a ese escenario, la oposición busca al menos meter algunos cambios centrales en los proyectos. En el caso del Presupuesto, crear un Fondo para Municipios que este año ascendió a $116.000.000.000. También pretende incluir una cláusula para que Kicillof no pueda aumentar la designación de personal más allá de la prevista en el proyecto. Y en el caso de la ley Impositiva, eliminar las “facultades discrecionales” de manera que los impuestos no se incrementen más allá de los topes previstos en la normativa.
El proyecto contempla un incremento con tope del 28% del Inmobiliario Rural y Urbano para todas las partidas; no proyecta modificaciones en las alícuotas del Impuesto sobre los Ingresos Brutos; plantea una suba promedio del 13,8% para el 90% de los 1,9 millones de automotores registrados en territorio bonaerense; y restituye las bonificaciones para los contribuyentes pagadores, de un 5% para quienes no acumulen deuda, y por pago anual adelantado otro 10%.
“Finalizando el 2024, la recaudación por impuestos patrimoniales sigue mejorando y es el impulso de la recuperación en la recaudación propia, lo que demuestra el esfuerzo que vienen realizando los contribuyentes bonaerenses el corriente año”, dijo el senador opositor Marcelo Daletto. Así, dio un indicio en el sentido de que la oposición buscará avanzar en la idea de eliminar las facultades “discrecionales” de la Agencia de Recaudación para que las subas previstas no se ubiquen por encima de la inflación.
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